Translate

Tratamiento con minerales.

Página 13.


Minerales:
Entiendo por tales aquellas moléculas sencillas que corresponden a elementos básicos para nuestra salud que tienen un efecto anticancerígeno demostrado.

Estas sustancias eliminando otra necesarias para la salud de nuestro organismo son cuatro: Magnesio, Selenio, Bicarbonato y Yodo.

El Magnesio tiene un efecto mixto por un lado es antagónica del calcio, desplazando a este a sus almacén natural como son la malla ósea bajando su nivel en la sangre. Es espasmolítico, actuando en la miofibrillas de los músculos estriados evitando calambres musculares, taquicardia y sobre las de músculo liso bajando la presión arterial y mejorando el tránsito intestinal evitando el estreñimiento; es importante para la vida, tanto animal como vegetal. La clorofila (que interviene en la fotosíntesis) es una sustancia compleja de porfirina-magnesio.

El magnesio es un elemento químico esencial para el ser humano; la mayor parte del magnesio se encuentra en los huesos y sus iones desempeñan papeles de importancia en la actividad de muchas coenzimas y en reacciones que dependen del ATP. También ejerce un papel estructural, ya que el ion de Mg2+ tiene una función estabilizadora de la estructura de cadenas de ADN y ARN. Interviene en la formación de neurotransmisores y neuromoduladores, repolarización de la neuronas.

El magnesio actúa como energizante y calmante en el organismo. La pérdida de magnesio se debe a diversas causas, en especial cuando el individuo se encuentra en circunstancias de estrés físico o mental. El magnesio que se encuentra en la célula es liberado al torrente sanguíneo, en donde posteriormente es eliminado por la orina y/o las heces fecales. A mayor estrés, mayor es la pérdida de magnesio en el organismo. En función del peso y la altura, la cantidad diaria recomendada es de 300-350 mg, cantidad que puede obtenerse fácilmente ya que se encuentra en la mayoría de los alimentos, siendo las semillas las más ricas en magnesio como el cacao, las almendras, harina de soja, cacahuetes, judías blancas, legumbres, avellanas, nueces y las hojas verdes de las hortalizas.

Sobre el sistema inmunitario sensibiliza a los leucocitos macrófagos para detectar substancias extrañas en nuestro cuerpo, informando a su vez a los leucocitos linfocitos T, B y células agresivas naturales que es lo que deben destruir (antígenos y células, en nuestro caso células cancerosas); además tiene un efecto alcalinizante del liquido intersticial, tóxico para las células neoplásicas.

El Selenio es un micronutriente para todas las formas de vida conocidas que se encuentra en el pan, los cereales, el pescado, las carnes, las lentejas, la cáscara de las patatas y los huevos. Está presente en el aminoácido selenocisteína y también se puede encontrar como selenometionina, reemplazando al azufre de la cisteína y la metionina respectivamente. Forma parte de las enzimas glutatión peroxidasa y tiorredoxina reductasa.[2]

Es antioxidante, ayuda a neutralizar los radicales libres, induce la apoptosis, estimula el sistema inmunológico e interviene en el funcionamiento de la glándula tiroides. Las investigaciones realizadas sugieren la existencia de una correlación entre el consumo de suplementos de selenio y la prevención del cáncer en humanos. Aún es tema de investigación, pero se sabe que la forma química en la que se encuentra el selenio (selenito, selenato o selenoaminoácidos) afecta a su absorción y a su posible toxicidad. Los datos actuales apuntan a que la forma orgánica (formando parte de proteínas como selenoaminoácidos) es la más beneficiosa para los animales. Además potencia el buen humor.

La deficiencia de selenio es relativamente rara, pero puede darse en pacientes con disfunciones intestinales severas o con nutrición exclusivamente parenteral, así como en poblaciones que dependan de alimentos cultivados en suelos pobres en selenio. La ingesta diaria recomendada para adultos es de 55-70 μg; más de 400 μg puede provocar efectos tóxicos.

El Bicarbonato de sodio a muy baja dosis es beneficioso para alcalinizar y crear un entorno hostil a las células cancerosas. A dosis mayores puede provocar deposito de calcio en los riñones (nefrocalcinosis) que degenerará en una insuficiencia de este aparato fundamental. A altas dosis es tóxico para todas las células de nuestro organismo y puede provocar la muerte.

El Yodo elemento fundamental para producir tiroglobulina y las hormonas tirosina T4 y T3 que orquestan el equilibrio de todos los órganos del ser humano ha demostrado ser eficaz como anticancerígeno. Dosis elevadas provocan disminución de la función del tiroides (hipotiroidismo)  y es tóxico para el organismo pudiendo provocar la muerte.

 Magnesio:

Link:  Algunos aspectos de la terapéutica inmuno-biológica de los tumores malignos.

Link:  MAGNESIO PARA LA VIDA.

Link:  Cloruro de Magnesio y Cáncer.

Link:  Hoy en día no es necesario morir de cáncer.

Link:  CURA MILAGROSA: Agua mineral+limon+cloruro de magnesio+bicarbonato de sodio.

Selenio:

Link:  Selenio.

Link:  Selenio y cáncer, últimos avances.

Link:  El selenio, poderoso contra el envejecimiento y el cáncer.

Bicarbonato sódico:



 

Yodo:

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario